La subida más sencilla a Moncayo arranca del Santuario de este, situado a 1.620 metros de altura. El Santuario es un edificio grande, con bar, restaurante y refugio. Es visible desde el valle, en el bosque, en la ladera norte. Para llegar al Santuario la ruta habitual es Tarazona-Agramonte. El último tramo es de pista, que conforme se asciende, va empeorando
una idea de la subida, a la que atribuyen 1 hora y 45’ desde el Santuario. Es un tiempo razonable para una subida tranquila.
Así llegamos a un cruce, con un poste
indicativo: siguiendo hacia delante, entramos en el circo glaciar, pero
optaremos por el camino de la izquierda, que remonta en zigzag la
enorme ladera pedregosa que cierra el circo a este lado.
Cima del Moncayo. |
Para subir al Moncayo el camino es evidente durante todo el recorrido. Parte de
la fuentPe (única en todo el recorrido) situada junto al refugio, al fondo.
Varios carteles y mapas nos dan
una idea de la subida, a la que atribuyen 1 hora
y 45’ desde el Santuario. Es un tiempo razonable para una subida tranquila.
El camino asciende por el pinar de forma mantenida pero sin
grandes repechos. A partir de una altura de 1850 m. Los pinos van dejando paso
a pedreras y zonas de matorral de montaña.
Sin
niebla, el camino resulta evidente, está bien marcado entre las piedras y
señalizado también con mojones. Así alcanzamos el Cerro de San Juan, una cima
ancha y herbosa, como todo el cordal al que pertenece el Moncayo. El Cerro de
San Juan está señalizado con un montón de piedras.
Desde allí, giraremos a la derecha y tras un breve
descenso, retomamos la última rampa que suavemente asciende a la cima del
Moncayo (2315 m.), donde semicírculos de piedra nos facilitan la estancia
protegiéndonos del viento. Las vistas son impresionantes si el día está claro.
Los prismáticos son muy recomendables.
El Moncayo parece un pico sencillo de ascender pero es muy traicionero, empiezas con un buen día y de repente se te echa la niebla y en pocos segundos ya te has desorientado y no sabes hacía donde te diriges, si hacía la cima, la provincia de Soria o de Zaragoza. Hay que respetar al Moncayo.
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